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La IMSI mejora las posibilidades de embarazo en parejas que llevan más de cinco años en tratamiento para ser padres. Los espermatozoides se observan hasta cuarenta veces más grandes que con las técnicas convencionales.

Seleccionar los mejores espermatozoides a 16.000 aumentos, mediante una nueva técnica llamada IMSI (Microinyección Intracitoplásmica de Esperma Seleccionado Morfológicamente), mejora las posibilidades de embarazo en parejas que llevan más de cinco años en tratamiento para ser padres.

La IMSI permite ver los espermatozoides a un tamaño cuarenta veces más grande que con la técnica convencional ICSI, visionado de esperma en una definición de 400 aumentos, que se utiliza para la fecundación in vitro.

Esta novedosa técnica permite descartar los espermatozoides que tienen defectos morfológicos que pueden asociarse a daños en el contenido genético que impiden la gestación. Según el centro barcelonés Institut Marqués, la IMSI ya ha permitido que el 41,4% de las parejas de larga esterilidad logre un embarazo.

Aunque aún hay un 58,6% de estas parejas que no consiguen la gestación con esta técnica, el doctor Juan Álvarez, director científico del Instituto Marquès y profesor de Biología Reproductiva de la Universidad de Harvard, califica el resultado de ‘excelente’ porque se pasa de un 0% de éxito a más del 40%. Además, el mismo doctor explicó que todas las parejas analizadas eran de mal pronóstico ya que no habían conseguido embarazo en muchos intentos y llevaban acumulado un importante desgaste físico y emocional.

Cabe señalar que la función principal del espermatozoide es introducir en el ovocito el ADN paterno. Éste se une al de la madre para crear el ‘manual de instrucciones’ del embrión, que contiene toda la información necesaria para que se desarrolle con normalidad. Si la carga genética del espermatozoide está dañada, el proceso se interrumpe.

El doctor Álvarez explica que la nueva tecnología IMSI de 16.000 aumentos permite al biólogo seleccionar a los mejores espermatozoides eligiendo aquellos sin vacuolas o con menos de dos pequeñas. Las vacuolas son hendiduras en al superficie de la cabeza del espermatozoide que se cree que están relacionadas con roturas del ADN.

El espermatozoide, además de transmitir el material genético, activa el ovocito poniendo en marcha sus mecanismos e introduce el centrosoma, que es una estructura que lleva entre la cabeza y el cuello y que es el responsable de la primera división celular y de las sucesivas en el embrión.