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Muchos hombres creen que el hecho de no poder reproducirse les resta masculinidad. Por este motivo, la mayoría de ellos son reacios a la hora de pedir consejo a especialistas y, muchas veces, ni comparten su problema con los más allegados. Según el Instituto Marqués, la esterilidad masculina suele causar emociones negativas extremas como frustración, sentimiento de culpa o depresión.

En España, la esterilidad afecta aproximadamente a un 15% de las parejas en edad fértil, lo que equivale a decir que una de cada seis parejas tiene problemas para lograr el embarazo, y parece que existe un aumento de su incidencia en nuestros tiempos.

Aproximadamente el 40% de los casos se deben a un factor masculino (alteraciones en la cantidad, la calidad o movilidad de los espermatozoides), el 40% se deben a un factor femenino (infecciones del tracto genital que dejan secuelas y cuestiones genéticas de diversa índole) y el 20% restante no se conoce la causa o se debe a afecciones tanto del hombre como de la mujer.

Los expertos reconocen que ellos no se toman de la misma manera que ellas el saber que no pueden tener descendencia. El doctor Manuel Elbaile, especialista en reproducción asistida del Instituto Marquès de Barcelona, explica que para los hombres no poder dar lo único que las mujeres necesitan para ser madres es un signo de cobardía. Además, esto les suele causar emociones negativas extremas como frustración, cólera, sentimiento de culpa, baja autoestima o depresión.

En este sentido, el doctor Elbaile añade que son las mujeres las que suelen llevar los pantalones ante esta situación, ya que ellos se paralizan mientras asimilan el problema y ellas, en cambio, van en busca de una posible solución. Y es que ser estéril, hoy en día, tiene cura.

Según una investigación llevada a cabo por el Servicio de Reproducción Asistida del Instituto Marquès de Barcelona, seis de cada diez jóvenes españoles tienen un semen por debajo de los parámetros de calidad que la Organización Mundial de la Salud (OMS) considera normales. Elbaile explica que este porcentaje no significa que todos estos jóvenes sean estériles, pero añade que tardarán más tiempo en dejar embarazada a su pareja cuando quieran tener hijos y que no todos lo conseguirán.

A este dato, se ha de añadirle que los gallegos, andaluces y madrileños son los españoles que mejor calidad espermática tienen. Por otro lado, los catalanes, valencianos y vascos, los peores. Aunque aún no se conocen con precisión las causas exactas de los factores de deterioro de la calidad del semen español, se cree que distintos factores ambientales como la exposición a la radiación, pesticidas o sustancias tóxicas utilizadas en la industria, junto al tabaquismo, son responsables de numerosos casos de esterilidad masculina en las últimas décadas.