Trastorno en que las glándulas sexuales (gónadas) producen pocas o ninguna hormona. Las gónadas de los hombres son los testículos y la de las mujeres son los ovarios.

El hipogonadismo puede ser de origen primario o central. En el primario, la funcionalidad de ovarios y testículos se ve alterada por distintas causas como son la radiación, cirugía, infecciones, enfermedad hepática y renal, trastornos genéticos y del desarrollo y algunos trastornos de tipo autoinmunitario. El hipogonadismo primario de causa genética más común en las mujeres es el síndrome de Turner y en los hombres el síndrome de Klinefelter.

El hipogonadismo de tipo central supone un mal funcionamiento de la hipófisis y el hipotálamo, que son los centros del cerebro que controlan las gónadas y puede ser debido a ciertos medicamentos, radiación, cirugía, traumatismos, infecciones, problemas genéticos, tumores, deficiencias nutricionales, exceso de hierro (hemocromatosis) y pérdida de peso rápida y significativa (anorexia). El hipogonadismo central de causa genética se produce en los hombres que padecen el síndrome de Kallaman y va acompañado de una disminución del sentido del olfato.

Cuando el hipogonadismo se produce en la infancia va afectar de una manera distinta que cuando se produce en la edad adulta. En el caso de las niñas, éstas no menstrúan y pueden ver afectado el desarrollo de las mamas y la estatura. Si el hipogonadismo tiene lugar después de la pubertad, los síntomas más frecuentes son la pérdida del vello corporal, aparición de sofocos, clara disminución de la libido y suspensión de la menstruación.

En cuanto se refiere a los niños, el hipogonadismo afectará a su desarrollo muscular, a la aparición de la barba y puede causarle problemas de crecimiento. En el hombre adulto, los síntomas más usuales son los problemas sexuales, pérdida muscular, disminución del vello y de la barba y agrandamiento de las mamas.

Cuando el hipogonadismo central se debe a la presencia de tumores, los síntomas más característicos son dolores de cabeza o pérdida visual, secreción lechosa de las mamas y síntomas parecidos al hipotiroidismo.

Para tratar el hipogonadismo se administran una serie de hormonas que serán distintas según el caso y si se trata de un hombre o una mujer.

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