Invitro TV
La redacción de Invitro TV está compuesta por profesionales de la comunicación y de la reproducción asistida, que trabajamos para ofrecerte los mejores contenidos.

Durante los últimos años, las donaciones de óvulos han ido aumentando básicamente por dos motivos: en primer lugar, porque las mujeres cada vez son mayores a la hora de tener el primer hijo; en segundo lugar, por la crisis.

Lo ha explicado Eric Saucedo de la Llata, que es el director médico de la Clínica Imar (Murcia). Asegura que ha habido un aumento generalizado de donaciones de óvulos desde hace unos cinco-diez años. Esto, argumenta, es debido a la crisis pero fundamentalmente al hecho de que las mujeres retrasan cada vez más el momento de ser madres. «Cada vez es más frecuente encontrar mujeres mayores de 40 años en busca del deseo de recibir óvulos».

También es debido a enfermedades que perjudican la fertilidad femenina. Por ejemplo, la endometriosis, que es la aparición y crecimiento de tejido endometrial fuera del útero, afecta directamente a la calidad ovular. «Cuanto más tarda una mujer en buscar un embarazo, este tipo de enfermedades aparecen con más frecuencia o se hacen más graves». El tabaquismo también es perjudicial en este sentido.

Según Eric Saucedo de la Llata, en España se realizan muchas donaciones porque en otros países de la Unión Europea los criterios son mucho más restrictivos a la hora de la donar óvulos. Además, aquí se gratifica a la mujer que se convierte en donante. La recompensa económica ha hecho que en tiempos de crisis muchas más mujeres quieran ser donantes.

La donación de óvulos consiste en la extracción de los óvulos de una mujer sana en edad fértil. Unos óvulos que serán usados en otras mujeres con problemas de fertilidad que, por diferentes motivos, no pueden concebir de forma natural, básicamente porque tienen óvulos de «mala calidad».

Para poder ser donante, una mujer tiene que reunir varios requisitos fundamentales: ser una persona sana, tener entre 18 y 35 años, no tener enfermedades infecciosas como la hepatitis o el VIH, etc. Se les realiza un estudio completo de fertilidad para comprobar que sus óvulos son de «buena calidad». Además, también se someten a pruebas psicológicas.

Por otro lado, el médico Eric Saucedo de la Llata también afirma que la demanda de los tratamientos de reproducción asistida ha aumentado en las clínicas privadas debido a los recortes en Sanidad, que limitan el acceso a los tratamientos en los centros públicos.

Antes, la Seguridad Social daba tres ciclos de reproducción asistida, posteriormente lo recortaron a dos ciclos y recientemente a uno, «lo que va a incrementar más la cantidad de ciclos de reproducción que realizamos en las clínicas privadas».