Josep Oliveras
Josep Oliveras.
Biólogo especialista en técnicas de reproducción humana asistida.

Según un reciente estudio, un virus de la familia de los herpes se encuentra presente en las células endometriales del 43% de las mujeres con infertilidad.

A pesar de los constantes avances científicos, en alrededor de un 25% de los casos no se puede establecer el motivo por la que una persona o pareja no logra el embarazo.

Un nuevo estudio publicado recientemente por investigadores de la Universidad de Ferrara en Italia puede haber descubierto una nueva causa que explique algunos de estos casos. Se trataría de la presencia en las células del endometrio (pared del útero) de un virus de la familia de los herpes, el herpesvirus humano tipo 6 o HHV-6A.

Este virus fue descubierto en 1986 y se ha detectado en casos de neumonitis, miocarditis, esclerosis múltiple y trastornos inmunitarios entre otros. Hoy por hoy aún se desconoce su frecuencia en la población.

A pesar de que se ha identificado la presencia del virus en el tracto genital femenino, sus consecuencias a nivel ginecológico son muy poco conocidas. Algunos estudios previos habían apuntado la posibilidad de que la infección por el virus HHV-6A tuviera efectos adversos sobre la gestación, pero este es el primer estudio que establece una posible relación con casos de infertilidad.

En el estudio se analizó la presencia del virus en las células endometriales procedentes de dos grupos de mujeres (66 en total), diferenciadas en dos grupos según sus antecedentes reproductivos. El virus fue detectado en el 43% de las mujeres con infertilidad primaria, es decir que nunca habían logrado un embarazo. Por el contrario, en ninguna de las muestras de mujeres que se habían embarazado previamente se detectó el virus.

Además de confirmar que las células infectadas por el virus eran las de la pared del útero, los investigadores tomaron muestras en diferentes fases del ciclo menstrual. Al analizarse la presencia del virus en cada una de ellas, se detectó una mayor expresión en la fase posterior a la ovulación, en la que se produce la implantación del embrión en el útero.

Los investigadores concluyen el estudio realizando una hipótesis sobre el mecanismo por el que podría actuar el virus. Según el artículo, la infección desencadenaría una serie de reacciones en el sistema inmunológico. Se verían modificados los niveles de las llamadas células Natural Killer (NK) y se verían alteradas las proporciones entre distintos tipos de citoquinas.

Las células NK son un tipo de leucocitos o glóbulos blancos que desempeñan un papel fundamental en la interacción entre el embrión y el útero materno, permitiendo la implantación. Esta interacción con el resto de células se realiza mediante la secreción de citoquinas (o citocinas), que son son proteínas que participan en la comunicación entre células cercanas.

Este cambio en el patrón inmunológico de las células endometriales dificultaría o impediría la implantación del embrión en la cavidad uterina.

Para confirmar los datos obtenidos en el estudio, los investigadores destacan que el perfil inmunológico de las mujeres con infertilidad primaria pero sin presencia del virus es muy similar al de las mujeres fértiles.

Actualmente, es posible detectar el virus HHV-6A mediante una biopsia de tejido endometrial, pero no existe un tratamiento específico para el mismo, aunque es sensible a los tratamientos contra el citomegalovirus (CMV) por su gran similitud genética.

 

Link al artículo:

Marci R, Gentili V, Bortolotti D, Lo Monte G, Caselli E, Bolzani S, et al. (2016) Presence of HHV-6A in Endometrial Epithelial Cells from Women with Primary Unexplained Infertility. PLoS ONE 11(7): e0158304. doi:10.1371/journal.pone.0158304