Josep Oliveras
Josep Oliveras.
Biólogo especialista en técnicas de reproducción humana asistida.

Las probabilidades de embarazo natural son especialmente altas cuando la mujer tiene menos de 35 años y el tratamiento indicado es la inseminación artificial.

El estudio es uno de los más completos hasta la fecha sobre los resultados de las técnicas de reproducción asistida a largo plazo. Se ha dado a conocer en el congreso anual de la Sociedad Europea para la Reproducción Humana y Embriología, celebrado esta semana en Helsinki. Incluye 19.884 mujeres que se sometieron a tratamientos de fertilidad en Dinamarca entre los años 2007 y 2010.

De los resultados del estudio se desprende más de la mitad de las mujeres (57%) que iniciaron tratamientos de reproducción asistida tuvieron a su bebé en menos de dos años. Uno de los datos más sorprendentes es que a pesar de estar en tratamiento,  el 14% de las parejas consiguió el embarazo de forma natural.

La realización de este estudio fue posible en Dinamarca ya que existe un registro de todos y cada uno de los tratamientos de fertilidad que se llevan a cabo y los niños que nacen como consecuencia de ellos. Una de las investigadoras que participó en el estudio, la Dra Sara Malchau del Hospital Universitario de Copenhague afirmó que “Las principales preguntas que nos hacen nuestros pacientes son: ¿Cuáles son mis probabilidades de tener un bebé? Y ¿cuándo lo conseguiré?” y añadió “ahora podemos proporcionar a las parejas un pronóstico fiable, comprensible y estratificado por edades en el momento en el que empiezan su tratamiento”.

Como era de esperar, el estudio corroboró que la edad es el factor pronóstico más importante. En un plazo de cinco años, el 80% de las mujeres menores de 35 años habían dado a luz, mientras que en mujeres de entre 35 a 40 años este porcentaje se reducía al 60,5% y caía al 26% en mujeres mayores de 40 años.

“En general, las tasas de éxito de los tratamientos de reproducción son buenas, pero a veces los resultados tardan un tiempo. A menudo las parejas necesitan más de un intento y no hay que olvidar que en algunos casos las probabilidades de embarazo espontáneo siguen siendo razonables”. Explicó la Dra Malchau.

A menudo es necesario más de un tratamiento de reproducción asistida

Los embarazos espontáneos después de algún tratamiento de fertilidad fallido o entre tratamientos se observaron en todos los rangos de edad, pero especialmente en mujeres menores de 35 años sometidas a inseminación artificial. A los cinco años de iniciar el primer tratamiento de inseminación artificial, el 18% de esas mujeres dieron a luz al lograr el embarazo sin técnicas. En el mismo rango de edad pero en mujeres sometidas a fecundación in vitro, ese porcentaje fue sólo del 8%.

La explicación de estos resultados reside en que la inseminación artificial es el tratamiento de elección en casos menos severos, en los que hay por ejemplo problemas en la ovulación o una reducción leve en la calidad seminal.